El 19 de agosto de 2022, se publicó en el Diario Oficial El Peruano, el D.S. Nro. 103-2022-PCM que aprueba la Política Nacional de Modernización de la Gestión Pública (PNMGP) al 2030; de este modo se da continuidad a la anterior “Política Nacional de Modernización de la Gestión Pública al 2021” que fue aprobada el año 2013 y cuyo horizonte temporal ya había vencido; sin embargo al parecer no se ha elaborado una evaluación de dicha política, en particular a nivel de gobiernos subnacionales, tanto regionales y con mayor énfasis a nivel municipal distrital y provincial, en cuyos niveles los avances de la modernización son insignificantes. Dicha política planteaba cinco pilares, de los cuales podemos observar: el primero de los planes estratégicos, tanto nacionales y locales, que están en proceso de actualización, el Plan Estratégico de Desarrollo Nacional al 2050, fue aprobado recientemente el 28-07-22, lo mismo sucede con los Planes de Desarrollo Local Concertado (PDLC) la mayoría de los cuales deben de ser alineados y actualizados; el cuarto pilar de implementación del servicio civil meritocrático, que ha sido simplificado y viene avanzando en la cobertura de entidades que se acogen al mismo; el quinto pilar de monitoreo y evaluación, que débilmente se ejecuta en los sectores de gobierno; y los ejes transversales como el gobierno abierto y electrónico, con modesta implementación y que requieren mayor impulso. En los últimos años han sucedido cambios de impacto en la gestión pública, como la crisis sanitaria por la pandemia, que ha obligado a una transformación digital acelerada y al mismo tiempo la pobreza ha vuelto a incrementarse por el desempleo y el decrecimiento económico; asimismo la recurrente crisis política, inestabilidad y la gravedad de la corrupción que ha corroído todos los niveles de gobierno, sin duda son cambios de magnitud, conjuntamente que los desafíos del cambio climático y la urgencia del desarrollo sostenible. Ante este panorama, es imperativo la actualización y reformulación de las políticas públicas nacionales, y una de las más trascendentes corresponde a la modernización de la gestión pública. La PNMGP al 2030, parte del enunciado diagnóstico del problema público central, los “bienes, servicios y regulaciones no responden a las expectativas y necesidades de las personas y a la creación de valor público”, a su vez identifica cinco causas directas (1) inadecuado diseño de políticas públicas; (2) inadecuadas estrategias de intervención; (3) limitada capacidad de la gestión interna; (4) débil seguimiento y evaluación y (5) insuficiente apertura del Estado hacia las personas; por tanto el tratamiento de dichas causas permitirá lograr la situación futura deseada “al 2030, contaremos con bienes, servicios y regulaciones de calidad que logren resultados de política pública, basados en evidencia y que atiendan las necesidades de las personas de manera oportuna y eficiente”. Debemos destacar que el modelo conceptual que sustenta este nuevo plan, se basa en la lógica de la cadena del valor público y se destaca las acciones de seguimiento, evaluación y mejora continua; y transversalmente se propone el “Estado Abierto” al servicio de las personas, y que debe brindar información transparente, datos abiertos, y promover la participación ciudadana en la co-creación de políticas públicas; así como los mecanismos de integridad pública y rendición de cuentas, que sintetiza como la “nueva gobernanza pública”.

A continuación se plantean once alternativas de solución, que habrían sido aprobadas en talleres con equipos técnicos de 33 entidades públicas; de ellas podemos destacar: construir políticas públicas basadas en evidencia; articulación intergubernamental e intersectorial; acceso a servicios vía canales digitales; gestión del conocimiento y mejorar continua en la calidad de los servicios; transparencia y acceso a la información, participación, rendición de cuentas e integridad pública; y fortalecer las estrategias comunicacionales de las entidades públicas. Luego se plantean cuatro objetivos prioritarios, que integran dichas alternativas, como son (1) políticas públicas que respondan a las necesidades y expectativas de las personas; (2) mejorar la gestión interna, (3) mejora continua en el Estado y (4) garantizar el gobierno abierto; cada objetivo tiene indicadores, metas y responsables. En resumen, está en vigencia una nueva Política Nacional de Modernización de la Gestión Pública (PNMGP) al 2030; quizás algo ambiciosa, pero es necesario su seguimiento y evaluación desde la sociedad civil, y por cierto de los propios actores del sector público, tanto los servidores públicos, funcionarios y el personal de confianza y altos funcionarios del gobierno, en sus tres niveles de gobierno, la posibilidad de avanzar firmemente en el logro de sus objetivos, metas e indicadores, será fruto de un trabajo integrado, destacando el rol de la participación ciudadana y la sociedad civil, y un factor clave es el fortalecimiento de la institucionalidad. Que esta política no sea un documento burocrático más, sino que genero resultados al servicio de las personas.

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